Las luces se atenuaron en aquel lugar
Y la oscuridad fue llegando de a poco y en el momento preciso
La oscuridad de aquel bohemio lugar era distinta
Se percibía llena de luces coloridas
Que encendían el tenue lugar
Y con una gota de magia todo su alrededor
Percibió de inmediato que todo el año vivido
Fue simplemente un año completo de matices
Oscuro y siniestro y al mismo tiempo brillante
Al igual que el lugar de una noche de domingo
Observó la calidez y la desolación concentrada en un solo lugar
Y pensó en todos los presagios y deseos que pudo existir en ese lugar
Divisó la decoración y la oscuridad que caía por sus hombros
Y entonces imagino los mil besos que el lugar conservó
Las millones de lunas que acompañaron todas las melodías
Las historias extrajeras,
Los amores pasajeros,
Las aventuras improvisadas,
Y los recuerdos y deseos indelebles que regocijó el lugar
Y finalmente...al llegar a su propio universo...leyó:
"La mitad de la belleza depende del paisaje y la otra mitad de la persona que lo mira"
Esa frase era exactamente lo que el lugar le devolvió
Para devolverla a su propia noche de
ensueños
Y de realidades venideras y desafiantes
Fue la frase que cerró tantos miedos y recuerdos del pasado
Y finalmente se encendió en ella todas y cada una de esas luces coloridas
Aquellas que le permitieron seguir amando, soñando, arriesgando y viviendo
